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OBS.- El hallazgo de restos de la Romanización en este lugar no se debe al azar, sino que había una poderosa razón lingüística para obtener resultados positivos. En efecto Viloria, según los lingüistas, proviene de la doble palabra latina "villa aurea", es decir, casa de campo dorada. Por una transformación fonética ha pasado a contraerse y a convertirse en Viloria. En otros topónimos así llamados se han encontrado restos romanos. Y en este caso no fue difícil hallarlos detrás de los corrales en una zona llana. Parece ser que hubo una granja agrícola romana, desde elsiglo II y que tuvo continuidad a través de los siglos, en un pequeño núcleo de población sin llegar a tener la categoría de aldea. Es posible que estas fincas, que formaron un fundus romano, hayan sido cultivadas a lo largo de casi dos milenios como una unidad indivisible por pertenecer a un único dueño. Los primeros datos históricos conocidos acerca de este lugar son del siglo XI, se conservan en el Becerro de Leyre por haber sido Viloria propiedad de los benedictinos (J.C. Labeaga. Op. cit. TAN, nº 6, 1987).
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